
Esta recreación es esencial por dos razones. En primer lugar, sabemos que la respuesta femenina es algo más lenta que la masculina, por tanto, los prólogos acortan la distancia entre ambos y hacen posible que la mujer quede satisfecha e, incluso, que la pareja pueda alcanzar el clímax al mismo tiempo. Por otra parte, hay que tener en cuenta que, sin una debida preparación, el coito sería imposible o produciría verdaderos estragos. Durante el juego sexual, se lubrifican el orificio vaginal y el pene para combatir la sequedad y evitar así las erosiones en las mucosas genitales.
En una relación sexual es muy importante que ambos participantes sean lo suficientemente sinceros como para poder expresar al otro lo que les gusta o les desagrada, sin que ello sea motivo de ofensa. Debe existir la complicidad necesaria para pedir un cambio de conducta si es preciso. De esta forma, la pareja estará en condiciones de colmarse de gozo recíprocamente, sin caer en la rutina.
La ansiedad de hombre que es eyaculador precoz hace que siempre realice juegos sexuales previos extremadamente cortos.
Son tan breves que en muchos casos ni siquiera la penetra a su pareja que ya ha eyaculado, terminándose todo lo que se había planeado.
Es fundamental tener buenos juegos sexuales previos. Amplitud en el tiempo de los juegos y en la variedad de recursos que utilice la pareja durante los mismos .
Las caricias, besos, mimos, suaves succiones mutuas deben ir realizándose con total libertad.
El momento de desvestirse, puede ser realizado mutuamente, como un juego, e ir lentamente poniendo al descubierto la bella humanidad de cada uno, descubriendo lentamente las partes íntimas, sin prisa, con todo el tiempo del mundo, como saboreando un exquisito y apetitoso manjar.
El control de la situación por parte del hombre debe ser total en esta etapa. Es una etapa critica para el eyaculador precoz.
Es tal vez uno de los momentos mas críticos, donde la concentración, por hacer gozar a la mujer, autocontrolándose debe ser fundamental.
Todo el proceso de juegos sexuales previos, no debe apurar en absoluto el disparo de la carga eyaculativa.
Este control o mejor dicho autocontrol, se puede aprender a realizar, con las técnicas adecuadas, para permitirse largos juegos sexuales previos, donde el goce y el disfrute sexual mutuo, sea lo mas sublime que las parejas puedan dispensarse.
Los juegos pre-coitales son muy importantes para las mujeres. No vayas directamente a la penetración, tomate tu tiempo y estimula las diferentes zonas erógenas de la mujer. Esto permite que la mujer se excite y lubrique, preparándola para la penetración. El sexo no debe ser reducido solamente a un acto de penetración y eyaculación. Muchas mujeres expresan que los juegos pre-coitales pueden ser tan o más importantes que la penetración.
Los genitales y los senos no son las únicas zonas erógenas de una mujer. El cuerpo de la mujer posee un gran número de zonas altamente eróticas. Atrévete a descubrirlas, prueba las orejas, el cuello, los brazos, las manos, la espalda, la entre pierna, los muslos e inclusive los pies, los labios, la cara, etc.
Los senos son extremadamente sensibles, no los trates con rudeza, no los aprietes, no los muerdas con fuerza. Preste atención a todo el seno y no sólo al pezón. Muchos hombres piensan que sólo la estimulación del pezón excita a la mujer. Los besos y caricias en todo el seno ofrecen sensaciones muy placenteras y excitantes.
Cuando estimule manualmente el clítoris, no lo haga con fuerza. El clítoris es tan o más sensible que el glande de un hombre. Algunas mujeres no toleran la estimación directa de él a menos que se encuentren muy excitadas. Al principio, estimula las zonas alrededor del clítoris, y progresivamente, a medida que ella se excite más, estimúlalo directamente.

Si introduces dedos en su vagina, asegúrese que la vagina esté bien lubricada, de lo contrario le va a causar mucho dolor a su pareja. Introducir muchos dedos a la vez puede causar mucho dolor, como regla, si no está seguro de cuántos dedos su pareja puede aceptar sin causarle dolor, empiece introduciendo uno, y luego pregunte si desea que introduzca otro y así sucesivamente. Asegúrese que sus uñas estén bien cortadas y que sus dedos se encuentren limpios, de lo contrario puedes causarle heridas e infecciones